LA GENTE. Si ya sé, parece una respuesta lírica acompañada de violines que ya hemos escuchado por doquier. Pero bien vale la pena entender exactamente porqué se dice que el negocio de los negocios es la gente, o mejor dicho, el negocio en los negocios está en la gente. ¿Qué es una empresa?. Una empresa no es más que una iniciativa humana que une a varias personas en torno a algún sueño maravilloso que las anima a expresar sus talentos al máximo y a aportar un gran valor a aquellos a los que sirven. Así que, una empresa es sobre todo un proyecto para ayudar a otros. Es por ello que, el empresario es aquella persona capaz de reunir a un grupo de personas que acompañen el sueño y además lo consigan sin que el directamente haga el trabajo, quedando su trabajo enfocado exclusivamente a profundizar esas relaciones para fortalecer el liderazgo del sueño. El principal negocio en los negocios es contactar personas y agregarles valor. Es importantísimo recordar esto, porque en estos tiempos tan frenéticos al que trabajamos, es fácil sacrificar las relaciones en favor de los resultados.
EL NEGOCIO ES SERVIR, LUEGO VIENE EL DINERO
Mejor dicho por la Madre Teresa: "El que no vive para servir, no sirve para vivir". Esta frase esta diseñada no desde la retórica espiritual altruista, sino para tomarla realmente en serio para cualquier aspecto en nuestras vidas, y el que no crea que DIOS es un Business Development (en otra entrega explicaremos el porqué), entonces no ha entendido la fuerte importancia que tiene el replanteamiento del capitalismo moral. Hay que tratar a la gente excepcionalmente bien. Hay que desvivirse por los clientes, y ayudar a desarrollar las capacidades de la gente que comparte contigo la oportunidad de ofrecer lo mejor de si mismo a través del trabajo. "Una organización invencible no es más que una serie de magníficas relaciones que se extienden por toda la empresa, todas ellas centradas en algún edificante resultado" - Robin Sharma.
ENTENDIENDO EL TÉRMINO S-E-R-V-I-R
Se Servicial. Todos los seres humanos nos mueven profundos anhelos de los que podemos ser o no conscientes. Deseamos saber que estamos expandiendo nuestro potencial y creciendo como personas. Deseamos saber que, cual sea nuestro trabajo, estamos dejando nuestra huella. Deseamos vivir de tal manera que cuando nos llegue la hora seamos recordados por algo. Nadie quiere llegar a su lecho de muerte dejando atrás una vida que no ha significado nada, es hora de Servir.
Escuchar. Para tener relaciones de primera clase, es necesario escuchar. Hay que hablar menos y escuchar más. Otro de los más profundos anhelos de los seres humanos es el deseo de ser comprendidos. Para hacer negocios, es necesario cultivar las relaciones a través de escuchar lo que quiere y desea tu cliente y tu equipo de trabajo. Todos tenemos una voz interior y todos queremos expresarla. Y cuando vemos que alguien se toma el tiempo de oirla y acogerla, nos abrimos a esa persona, damos nuestra confianza, respeto y aprecio por esa persona y entonces crece. Esto es agregar valor.
Relacionarse. Sal ya a la calle y comienza a cultivar nuevas relaciones con clientes, amigos, allegados, compañeros etc. Dejarse ver es una acción increíble de valor. Cuando la gente te ve a la cara, existes para ellos. Empiezan a conocerte. Empiezas a gustarles. Y en los negocios siempre hay algo que recordar, que a la gente siempre le gusta hacer negocios con la gente que le gusta. Averigua que les preocupa a tus clientes y compañeros, como se sienten en estos tiempos difíciles, y conéctalos con un puente de salida para que visualicen sus sueños y habrás ganado lealtad = Rentabilidad. "El ingrediente más importante en la fórmula del éxito es saber llevarse bien con los demás" - Theodore Roosevelt.
Valorar los esfuerzos. Cuando comprendes los esfuerzos que se han emprendido para agregarle valor a un cliente o a un compañero, más agregarás valor tú, porque habrás entendido que hay un sin número de acciones dispuestas para proteger los sueños de tu cliente por recibir un servicio o producto legendario y los sueños del empresario que decidió generar todos esos esfuerzos por conseguir exactamente lo mismo que su cliente quiere. Intenciones Inspiradas. Puedes ser un genio, tener un sinfin de magníficas oportunidades y un plan para aprovecharlas, pero si no tienes energía todos los días, al final no habrá ningún resultado, es por ello que inspirar tus intenciones para servir es haber maximizado tu potencial en servicio de los demás. Responder y no Reaccionar. La trampa clásica en la que caen muchas personas en los negocios, es que cuando aparece una dificultad les entra el pánico y se pasan horas resolviendo un incendio detrás de otro. Nunca te acostumbres a reaccionar ante las dificultades, sé elegante bajo presión. Deja de preocuparte por todo lo que no puedes controlar y dedícate a mejorar lo que sí está en tus manos.
GENTE MOTIVADA, GENTE RENTABLE
Un negocio no es más que una especie de conversación. Y si la empresa en la que trabajas olvida avivar esa conversación y las relaciones humanas entre los implicados, la conversación acabará pronto, y el negocio fracasará. En la sociedad domina la creencia de que el objetivo es ganar dinero. El dinero es un resultado, y este solo se consigue a través de la rentabilidad, y la rentabilidad solo la pueden conseguir las personas y su sentido de agregar valor a las relaciones humanas, bien sea con los clientes, proveedores, y resto de la gente dentro de la organización donde se trabaja. Es por ello, que hoy día en muchas organizaciones, se trabaja de manera errónea el concepto de la rentabilidad desde el punto de vista del dinero, y no desde el manejo de las relaciones humanas que es el origen de la rentabilidad. La palabra NEGOCIO proviene de dos latinas Nec y Otium, para los romanos el Otium era lo que se hacía en el tiempo libre (OCIO), sin ninguna recompensa, entonces negocio para ello era lo que se hacía por dinero, era ocupar el tiempo de ocio e intercambiarlo por dinero, que cuando se generaba de manera organizada se llamaba empresa. Entendiendo el origen de la palabra NEGOCIO, se asocia a la productividad (tiempo dedicado a producir un resultado) y esta conduce a la rentabilidad, y todo esto se consigue si y solo si, las personas que acompañan a la iniciativa humana a través de la conversación se involucran de manera intencionada y motivada hacia el mismo cumplimiento del sueño. Como diría John F. Kennedy "La Felicidad consiste en el pleno uso de tus capacidades a su máximo nivel", y esto se consigue dentro de una iniciativa llamada negocio, la conclusión, si tu gente está motivada tu gente será rentable para tu negocio.
AGRADECER A LOS MENOS AGRADECIDOS
Todo el mundo dentro de una organización importa. Todas las personas dentro de la empresa tienen que estar comprometidas y conectadas. Todas las personas a las que conozcas, independientemente de su apariencia o su cargo, tienen un padre y una madre, tienen una historia que contar, y que vale la pena escuchar. Todo el mundo conoce alguna lección que vale la pena aprender. Las buenas relaciones te darán una buena empresa. Las relaciones extraordinarias te darán una empresa extraordinaria. Agradece siempre a los menos agradecidos, de alguna manera apoyan en importante medida en la productividad del equipo que lleva la mayor rentabilidad al negocio, y su aporte cuenta, significa productividad y rentabilidad también al igual que el resto.
El éxito en los negocio lo otorga la gente, no hay dudas, las empresas exitosas y rentables son aquellas que invierten en su gente, su desarrollo y su crecimiento, porque saben que el crecimiento de ellas es traducción del crecimiento de la empresa. Cultiva a las personas, cree en ellas, cuídalas, estímalas, riégalas. Dales lo mejor que puedas darles. Y ya verás los frutos tan espléndidos que recoges. Las personas son el elemento más importante en una empresa con éxito. La ley de la reciprocidad esta es una de las leyes más fuertes que rigen las relaciones humanas. Si de verdad ayudas a los demás, los demás harán cualquier cosa por ayudarte a ti. Si de verdad te entregas a un compañero, el compañero se entregará a ti. Así es la naturaleza humana. Haz que otros tengan éxito, y te llevarán éxito a ti.
Hasta otra entrega.
Saludos
Marlon
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